Hyundai i30 Fastback 1.5 TGDI 48V N Line

Estamos al volante de la tercera generación del i30 en acabado deportivo N Line y estilo coupé Fastback de 4,45 m, que forma parte de la gama de dos versiones más con carrocería berlina de 5 puertas y la familiar, que a Hyundai la denominan CW .

Se le reconoce por delante por una generosa parrilla pintada en negro en la que se ubican la matrícula y el anagrama de la marca. A los lados destacan las ópticas hacia los laterales y unas grandes buenas tomas de aire también en negro que creo que forman un conjunto muy atractivo. Las llantas son de 18 pulgadas, las carcasas de los retrovisores exteriores están pintados en negro brillante, cristales de las ventanas traseras oscurecidos, una salida del tubo del escape, el emblema "hybrid" y el triángulo por la luz de niebla en el detrás integrado en un parachoques más deportivo son otros detalles característicos de este Hyundai i30 Fastback N Line.

Antes de entrar en el interior del habitáculo me gustaría deciros que el acceso al maletero es muy bueno, mediante una gran puerta. Tenemos una gran capacidad de 450 litros que podemos aumentar hasta los 1.351 hasta plegamos los respaldos de los asientos traseros, una toma de 12 voltios y ganchos para sujetar la carga si fuera necesario, además de una zona porta objetos bajo el piso del maletero que también es muy útil.

Por dentro, el cambio respecto a las anteriores generaciones es evidente. La calidad ha aumentado en cada generación y aquí al ser un N Line aún se nota más. Me encanta el tacto y la estructura del volante de tres radios además de los pedales en aluminio, tipo deportivo. La combinación del cuadro de instrumentación analógico y la pantalla central de 10,25" digital para las funciones de infoentretenimiento con la conectividad para Apple CarPlay y Android Auto con Bluetooth y la tecnología Bluelink Connected Services y las últimas ayudas electrónicas a la conducción.

Lo ponemos en marcha. Se realiza mediante un botón, situado debajo del volante en la parte derecha del cuadro de instrumentación. ¡Ah! . Por cierto. La calidad de realización también la hago extensiva a los asientos con personalización de bordados N Line y que recogen perfectamente el cuerpo. Bajo el capó este modelo monta un motor turbo gasolina TGDI de 160 caballos de hibridación ligera (etiqueta Eco de la DGT), cambio manual de 6 marchas y sistema Drive Modo de tres opciones: Eco, Normal y Sport, con un esquema de suspensiones que priorizan el confort. Me ha sorprendido la respuesta de esta mecánica que sube de vueltas con facilidad ayudada por un escalonamiento del cambio que me ha parecido perfecto ya que aprovecha las brillantes prestaciones de este motor y, sobre todo, el buen tacto de la dirección y la precisión de la palanca del cambio así como la insonorización dentro del habitáculo.

Cilindrada: 1.482 cc / Potencia: 160 cv / Aceleración de 0-100 km / h: 8,6 segundos / Peso: 1.376 kg / Tracción: delantera / Consumo WLTP: 6,2 l / 100km / Precio: 27.260 euros.