Ford Focus 1.0 EcoBoost 125 CV Titanium Aut8


Cambio radical. Efectivamente, la cuarta generación de este conocido modelo ha cambiado totalmente de apariencia exterior y en el interior ya que, además, adopta una nueva plataforma modular C2 que también repercute en un más amplio esparcimiento por los ocupantes y mucho más equipado que antes.

El Focus siempre ha sido un escaparate tecnológico y deportivo de la marca del óvalo durante los cerca más de 20 años de su historia de las tres generaciones anteriores, en las carrocerías de 3 puertas, de cinco, en versión Sedan y las deportivas ST y RS. Ahora lo hace solamente en las versiones de 5 puertas que mide 4,38 metros de longitud total y la familiar Sportbreak.


Desde el momento que vi las primeras imágenes me gustó su nueva estética con una mayor presencia de la parrilla frontal y el aspecto contundente tanto de la línea lateral como las ópticas posteriores, con la denominación "FOCUS" en medio del capó del maletero de 375 litros de capacidad, ampliable a 1.354 abatiendo los respaldos de los asientos traseros.


Por dentro, las mejoras afectan a todo el habitáculo, con una acertada ergonomía tanto de la posición de conducción como del cuadro de instrumentación presidido por una pantalla táctil de 8 pulgadas, situada en la zona alta de la consola central para poder controlar el sistema SYNC 3, el navegador y visionar la cámara trasera mucho más fácilmente. Novedad del Focus los la opción del head-up-display que llevaba nuestra unidad de pruebas que proyecta su imagen sobre una pantalla de policarbonato, muy útil para el conductor sin tener que apartar la vista de la carretera. Entre la dotación de seguridad que puede montar el nuevo Focus están los faros LED con iluminación adaptativa, la alerta de tráfico cruzado cuando vamos marcha atrás ó el reconocimiento de las señales de tráfico.



Nuestra unidad con la elegante acabado Titanium, incorporaba el cambio de marchas automático de 8 velocidades con mando giratorio. Un auténtico placer por la rapidez en subir o bajar de marchas aprovechando al máximo las prestaciones del motor de gasolina EcoBoost de tres cilindros que cuenta con la desconexión automática de un cilindro para el ahorro de combustible. De serie, el nuevo Focus lleva un selector del modo de conducción con tres programas; Normal, Eco y Sport. Una aportación genial para cada momento de conducción que Ford nos pone a nuestro criterio.


Si el cambio es completamente radical en su apariencia, lo que no ha variado y podría añadir que incluso ha mejorado es el comportamiento dinámico por carretera. Un aspecto del que siempre ha destacado el Focus dentro de su reñida categoría de las berlinas compactas. Siempre te sorprende su agilidad en las curvas, la dirección tan directa, buenos frenos y la facilidad de conducción.
Cilindrada: 999 cc / Potencia: 125 cv / Tracción: delantera / Aceleración 0 a 100 km / h: 9,7 segundos / Peso: 1.420 kg / Consumo homologado: 4,8 l / 100 km / Precio: 20.700 euros.