El mito vuelve por sus fueros. Fiel a sus orígenes, treinta años después, la sexta generación del Golf más deportivo de Volkswagen continua creando escuela por la facilidad de conducción, la efectividad en curva y una mecánica tan progresiva como eficiente. Ya le salen competidores ya, pero...quien estrenó la era de los compactosdeportivos y quien se ha adaptado mejor al paso de los tiempos ha sido el GTI, con las tres letras mágicas que se han hecho tan populares como otros iconos de la era moderna.
Dicen los incondicionales del GTI que de aquel aspecto contundente y radical de la primera generación de 1976, cada vez que ha salido un nuevo modelo ha ido decreciendo la furia que nos tenia acostumbrados. Quizás tengan razón, pero prefiero el equilibrio entre potencia y control sin olvidarnos de los grandes motores que le han montado debajo el capó, comopor ejemplo el fantástico TSI de ahora. Es el "precio" que se tiene que pagar para poder tener a nuestro abasto mucjas más ayudas electrónicas y de confort interior. Y es que el GTI siempre ha estrenado innovaciones que despuésimitan, como la inyección directa, el trubo, el cambio de doble embrague DSG o la novedad que hoy probramos, dotado de un diferencial electróncio y suspensión adaptativa.
Y como si se trata de un guión, tanto la estética externa como la ambientación interior siguen al pie de la letra que han de mantener una deportividad elegante sin ninguna intención de ser demasiado estridente. Claro que las llantas de 17 pulgadas, las salidas del escape, el alerón posterior y el generoso frontal lo delatan, poero todo está bien combinado y sin hacer mucho ruido.
Por dentro, los asientos continúan siendo perfectos para la sujección del cuerpo, la palanca del cambió está muy a mano y ahora el volante multifunción tiene la parte baja recta. El resto de equipamiento no se aleja en absoluto de una berlina de lujo: faros bi-xenón autodireccionables (giran en las curvas), climatizador por zonas, conexión multimedia, radio CD com MP3 y ocho altavoces y la clásica sopa de letras ESP, EDS, ASR y EDS para resumir el control de tracción, de estabilidad y frenada.
A su volante la diversión está plenamente asegurada, porque la suavidad en la manera ue da la potencia este motor es excepcional. No hay ninguna reacción brusca cuando el turbo entra en funcionamiento y siempre estira y estira sin desfallecer. Y si aún no tenemos bastante de las bondades de su bastidor, la opción de la suspension adaptativa DCC (880 eur) en modo Sport sujeta el coche al asfalto de una manera sorprendente. Yo también recomendaría el cambio automático de 6 marchas secuencial DSG de doble embrague. Con este cambio el placer de conducción sube muchos enteros. Por otra parte, tenemos el funcionamiento del ESP que nos permite una tracción que ja querrían coupés de altos vuelos. realia una ligera presión a la rueda interior en curva si necesitamos más tracción para ganar agilidad. Ja lo ven; de sensaciones deportivas va sobrado.
Cilindrada: 1.984 cc / Potencia: 210 cv / Aceleración 0 a 100 km/h: 6,9 segundos / Consumo medio: 7,3 litros/100km / Peso: 1.318 kg. / Precio: 28.910 euros.
