Poco a poco la línea de lujo DS que hereda la nomenclatura de los añorados modelos de los años 50 de la marca francesa va cogiendo más relieve. Si hace muy poco salió el DS3, la variante emocional y solamente en tres puertas del popular C3, en estos días se ha presentado el nuevo DS4 con un formato diferente y elegante que está entre un coupé (es un 5 puertas con las manecillas para abrir las puertas traseras disimuladas en los cristales) y un SUV por la superior altura de la carrocería con respecto a un compacto convencional de su segmento. Precios; entre 20.290 y 28.290 euros.
También en China se pudo ver el prototipo del futuro DS5, un coupé gran turismo con suspensión regulable y una mecánica híbrida diesel-eléctrica de 200 CV.
Realmente el diseño exterior de esta coche que mide 4,27 metros de longitud es impresionante, se mire por donde se mire. Me gusta la solución coupé de la parte lateral y los nervios de estilo de la carrocería con un perfecto equilibrio de formas desde el delante hasta detrás. También la vista posterior está muy resuelta con el spoiler al final del techo, los dos tubos de escape y los originales pilotos que llegan de los laterales y se integran en la parte superior de la puerta que da acceso a un buen maletero de 359 litros de capacidad. Por otra parte, Citroën ofrece un amplio abanico de opciones de llantas entre 16 y 19 pulgadas.
Por dentro, la elegancia se apodera de todo el conjunto. Hay disponibles para escoger cinco acabados diferentes en piel en dos tonalidades e incluso, el conjunto que forman el cuadro de instrumentación también puede ir forrado en piel. A mí me gusta un acabado donde la piel va cosida simulando trenzas en la parte central de los asientos porque me parece muy original. El resto del equipamiento para personalizar es claramente Premium, con el asiento del conductor con masaje, sonidos polifónicos, faros que ayudan en las curvas, alerta de cambio de carril, también un avisador de ángulo muerto para darnos cuenta en los posibles adelantamientos o el gran techo panorámico. La percepción de calidad es sensacional.
Los motores disponibles del nuevo DS4 hay tres gasolina; un VTi de 120 CV y los turbo THP de 156 y 200 CV. Por otro lado, los diesel se componen del HDi de 90 CV, e-HDi con el sistema Start/Stop de 110 CV y el HDi de 163 CV de nuestra prueba.
De las impresiones al volante en el primer contacto que tuve con motivo de su presentación internacional en Barcelona me quedó muy claro su vocación deportiva, respecto a su hermano gemelo, el C4. No es que la comodidad haya sufrido un cambio radical, pero si que noto que el DS4 va mucho mes pegado al asfalto. El motor empuja de una manera constante hasta la zona alta del cuenta vueltas. Es una sensación de potencia muy especial y con la efectividad de los frenos y la precisión de la dirección en las curvas invitan a una conducción divertida. La emoción está servida.
Cilindrada: 1.997 cc / Potencia: 163 cv / Aceleración 0 a 100 km/h: 8,6 segundos / Consumo medio: 5,1 litros/100km / Peso: 1.320 kg. / Precio: 26.490 euros.
También en China se pudo ver el prototipo del futuro DS5, un coupé gran turismo con suspensión regulable y una mecánica híbrida diesel-eléctrica de 200 CV.
Realmente el diseño exterior de esta coche que mide 4,27 metros de longitud es impresionante, se mire por donde se mire. Me gusta la solución coupé de la parte lateral y los nervios de estilo de la carrocería con un perfecto equilibrio de formas desde el delante hasta detrás. También la vista posterior está muy resuelta con el spoiler al final del techo, los dos tubos de escape y los originales pilotos que llegan de los laterales y se integran en la parte superior de la puerta que da acceso a un buen maletero de 359 litros de capacidad. Por otra parte, Citroën ofrece un amplio abanico de opciones de llantas entre 16 y 19 pulgadas.
Por dentro, la elegancia se apodera de todo el conjunto. Hay disponibles para escoger cinco acabados diferentes en piel en dos tonalidades e incluso, el conjunto que forman el cuadro de instrumentación también puede ir forrado en piel. A mí me gusta un acabado donde la piel va cosida simulando trenzas en la parte central de los asientos porque me parece muy original. El resto del equipamiento para personalizar es claramente Premium, con el asiento del conductor con masaje, sonidos polifónicos, faros que ayudan en las curvas, alerta de cambio de carril, también un avisador de ángulo muerto para darnos cuenta en los posibles adelantamientos o el gran techo panorámico. La percepción de calidad es sensacional.
Los motores disponibles del nuevo DS4 hay tres gasolina; un VTi de 120 CV y los turbo THP de 156 y 200 CV. Por otro lado, los diesel se componen del HDi de 90 CV, e-HDi con el sistema Start/Stop de 110 CV y el HDi de 163 CV de nuestra prueba.
De las impresiones al volante en el primer contacto que tuve con motivo de su presentación internacional en Barcelona me quedó muy claro su vocación deportiva, respecto a su hermano gemelo, el C4. No es que la comodidad haya sufrido un cambio radical, pero si que noto que el DS4 va mucho mes pegado al asfalto. El motor empuja de una manera constante hasta la zona alta del cuenta vueltas. Es una sensación de potencia muy especial y con la efectividad de los frenos y la precisión de la dirección en las curvas invitan a una conducción divertida. La emoción está servida.
Cilindrada: 1.997 cc / Potencia: 163 cv / Aceleración 0 a 100 km/h: 8,6 segundos / Consumo medio: 5,1 litros/100km / Peso: 1.320 kg. / Precio: 26.490 euros.